Vamos a empezar con los juguetes que hace un tiempo os comenté que tenía pendientes de realizar: artesanales, didácticos e interactivos ¡ por fin!, porque mira que ya tenía ganas de empezar a desarrollar todas las ideas que se me vienen a la cabeza y pasarlas a las manos. Es lo mismo que me ocurre con las camisetas de los peques, y es que el mundo infantil me apasiona.
Voy a comenzar con un tres en raya (todo un clásico) diferente a todos los demás, ¿ por qué?, pues sencillamente porque lo he realizado de manera artesanal, con colores muy llamativos para atraer la atención del niño y porque no vais a encontrar otro igual.
La verdad es que tiene bastante trabajo, porque además lo acompaño con una cajita de fieltro para guardarlo.
¿ Qué os parece?, no es para comérselo...............................
¿cómo lo he realizado?. Os dejo todas las fotos para las/os que os guste trabajar sin prisa y conozcáis el mundo del ganchillo y el fieltro. Solo necesitamos hilos de dos colores, aguja de crochet del nº correspondiente al grosor del hilo, fieltro grueso de dos colores, hilo de bordar y aguja.
Para la base: hilo (beige y verde en mi caso) y agujas de punto de media.
Las orejitas de conejo y ratón y las bases de los mismos
Lo rellenaremos antes de coser la base al cuerpo, puede ser guata o algodón, lo que prefieras.
Le colocaremos las orejitas consiéndolas al cuerpo con aguja de lana, bordaremos los ojitos y la boca.
En el caso del conejo haremos lo mismo. Por supuesto ninguno es idéntico a otro, ya que uno es más gordito o más alto que otro, etc. Tienen su propia identidad.
Hacemos individualmente cada cuadrado del tablero a punto bobo y seguidamente le haremos a ganchillo todo el contorno en un color que contraste para llamar más la atención del peque y que quede más vistoso. Posteriormente los uniremos con la aguja de lana a pespunte por el revés.
Espero que os haya gustado. A mí me ha encantado tanto cómo ha
quedado, que creo que se lo regalaré a mi hija porque me lo ha pedido varias veces mientras lo realizaba, pero no os preocupéis que si alguna/o os interesa solo tenéis que mandar un correo y me pongo manos a la obra. Los nuevos proyectos tienen también unos diseños que con toda seguridad gustarán a los mayores.
Qué os parece un cuento de caperucita que no es roja sino beig y que inventa su propio final acabando ella misma con el lobo que la quiere engañar. ¿Por qué siempre en los cuentos necesitamos del sexo masculino para salvarnos?. Pues vamos a romper esa regla. Aquí os espero para mi próximo juego.
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